martes, 12 de febrero de 2008

Vivas a la República y banderas tricolores a escasos metros del príncipe Felipe, en Madrid, durante la conmemoración de la guerra de 1808

Dos militantes comunistas, uno del PCE y otro del PCPE, actuando a título particular, sin representar oficialmente a sus partidos, han llevado a cabo una protesta ante el príncipe Felipe, esta mañana, ante el Palacio Real, con motivo de la conmemoración del bicentenario de la guerra de independencia del reino de España respecto del reino de Francia.
x Kaos Madrid (Para Kaos en la Red)


El acto apenas se había difundido, por lo que la presencia de público era más bien escasa, en cualquier caso, muy inferior a la de efectivos de los varios ejércitos que desfilaron en presencia de una nutrida representación de autoridades -electas y no electas- y otros "dignatarios", entre ellos, algún obispo.

La ceremonia empezó puntualmente a las 10:00 de la mañana, en la madrileña plaza de Oriente, muy cerca del lugar donde hace ahora doscientos años estalló la rebelión independentista que terminaría por expulsar a los invasores hacia más al norte de los Pirineos.

Primero apareció el alcalde Gallardón y luego fueron desfilando un buen número de caras conocidas, como la del Ministro Alonso (titular de la cartera de Defensa).

Pasados unos minutos, apareció el coche de la persona que pretende acceder a la jefatura de Estado sin pasar antes por un proceo electoral, el príncipe Felipe de Borbón, escoltado por otros vehículos de más de 100.000 euros (cuando el 20% de la población del Estado sobrevive con unas rentas que les sitúan por debajo del umbral de pobreza).

Justo al decender de su vehículo, los dos militantes comunistas, que se encontraban entre el público, en un lugar muy cercano a la zona de llegada de autoridades, sacaron una bandera tricolor republicana y empezaron a dar vivas a la República.

En ningún momento hubo altercados ni contra ellos, ni provocado por la pareja de jóvenes comunistas, cuya actitud fue en todo momento de civismo y no-violencia, como corresponde con una reivindicación republicana. Tampoco fueron objeto de retención ni detención.

Hecha la protesta, optaron por abandonar las inmediaciones, por su pie, sin esperar a que el acto concluyera (un desfile militar).

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